~ Never give up, for that is the place and time that the tide will turn. ~
Harriet Beecher Stowe


miércoles, 17 de marzo de 2010

El mazo al mar



El mazo al mar

La llave de mi auto
La llave de mi garage
La llave de mi almacén
La llave de mi buzón
La llave de mi casa
La llave de mi cuarto
La llave de mi diario

La llave de mí
La llave de ti

El código de mi banco
El código de mi tarjeta
El código de mi móvil

El código de mi lenguaje
El código de tu lenguaje

La contraseña de mi correo electrónico
La contraseña de mis otros correos electrónicos
La contraseña de todo material cibernético al que esté registrada

La contraseña de mi historia
La contraseña de tu historia

…El mazo se convierte en un peso más.

El acceso a la vida, el acceso al amor, el acceso a la amistad, el acceso al trabajo…
O se encuentra la puerta y no se tiene la llave
O se tiene la llave y no se encuentra la puerta
O se tienen ambas y uno se pierde por los pasillos.
Y los pasillos son muchos y son paralelos…a saber cual será el correcto.

Se pierde tiempo…mucho tiempo.
Se pierde la paciencia y se acaba el trato.
Se tumba la primera puerta y se encuentra la escoria de la sociedad.
Se tumba otra puerta y se encuentra la buena gente.
Se tumba otra y se encuentran paraísos,
Y otra todavía y se encuentran infiernos.

La variedad es mucha.
Y a mí me van gustando los pasillos que me permiten saborear las puertas y por ende, un poco de cada mundo.
Pero más que todo, me va gustando porque encuentro personas como yo, que buscan puertas, personas simples que exploran lugares, paisajes y mundos con tu misma curiosidad.

A veces solo quiero tirar el mazo al mar,
Tener menos cuidado con las cosas, con las personas, con los mundos y sus respectivos accesos.
Quitarme todos esos candados, cerraduras y llaves que son solamente un peso más.

En fin de cuentas, si las personas te lo permiten te dejarán entrar en sus vidas.
Si la vida te lo permite, te dejará entrar en un mundo que soñabas.
Si no, no. No te lo pienses más, tira el mazo al mar.
Eres lo que eres y punto.

Yo tiro el mazo al mar.
A mí ya no me interesa tener la llave, no me interesa.
Me rebelé y la tiré al mar.
Tengo mi puerta, pero no la cierro con llave.
Colecciono llaveros pero es gracioso porque ninguno de ellos llevan llaves.
Se han convertido en simple adornos.
Qué el mundo me reciba con los brazos abiertos no con sus cerraduras.

Yo tiro el mazo al mar. No me preocupo más.
La vida misma se encarga de plantearte las puertas.
Yo abro mi puerta. Tú abre tu puerta.

Verás que sin llaves ni cerraduras, todo fluye mejor.
Quítate un peso de encima y echa a volar
Tira el mazo al mar...


- Swan © -

1 comentario:

Neverknowsbest dijo...

Ten cuidado, a ver si tiras el mazo al mar y luego lo pierdes cuando lo necesitas ;)

http://quenoseademasiadotarde.blogspot.com/2008/11/sin-cerrojo.html